“[…] Guillermo Pinto Reyes, además de organista, es un profundo conocedor de la polifonía vocal clásica- con especial predilección por >Tomás Luis de Victoria- y un brillante pedagogo de las formas fundamentales de nuestra cultura musical occidental: el motete, la fuga, la sonata, etc. Lo anterior constituye su bagaje de alta cultura musical, el cual le permite entender y admirar lo mismo a Stravinski que a Schoenberg, por ejemplo, y también conmoverse con y nutrirse de la música popular tanto de México como de España y Rusia[…] Fragmento.
Rodolfo Ponce Montero