Durante la primera mitad del siglo XX surgió una de las amistades más entrañables y célebres del medio cultural mexicano. Amistad perdurable y generosa en experiencias memorables que, contrario a lo que pudiera pensarse, no inició en los círculos intelectuales y artísticos del país, sino en el seno del escultismo, movimiento juvenil internacional que para entonces ya había echado raíces entre nosotros. El escritor y dramaturgo Jorge Ibargüengoitia y el artista plástico Manuel Felguérez, guanajuatense el primero, zacatecano el segundo, se conocieron en la Ciudad de México y compartieron una adolescencia que nada tuvo de aburrida ni convencional, tal como lo recordaría el propio escritor en alguna de sus deliciosas crónicas, y tal como lo recoge Arturo Reyes Fragoso en este ameno y revelador libro, el cual se ubica a medio camino entre la biografía y la crónica. Dos artistas en pantalón corto. Ibargüengoitia y Felguérez, scouts es un recuento informado y jocoso de una relación de camaradería desarrollada a la par del México posrevolucionario donde ambos personajes, pese a sus diferencias de carácter y temperamento, pudieron convertirla en una enriquecedora experiencia vital y artística.
Luis Bernardo Pérez