Vanitas es un cuaderno que explora la flexibilidad del lenguaje y su poder evocativo acerca de lo profundamente humano a partir de objetos cotidianos, encontrados al azar, mínimos o aparentemente intrascendentes, que han servido a la autora de este libro para crear toda una red de asociaciones disparadas en todas direcciones, en la que imaginación, sentimiento y experiencia prevalecen, articulados. Es además un producto sumamente plástico y de actualísima estética que, habiendo abrevado en vanguardias, ha recuperado del barroco no sólo sus estrategias compositivas polimorfas y su riqueza expresiva, sino uno de sus temas más caros: el de la vanidad de las obras del hombre, entendida en su sentido de futilidad. En este tenor, la palabra y el poema no serían más que otras de las artimañas humanas que intentan superar ese horror al gran vacío que representa la propia perennidad, dominar ese universo extraño y ajeno que no es sino la realidad de todos los días.